La primera temporada de Westworld fue una agradable sorpresa. Con el estilo habitual de las series de HBO, Jonathan Nolan y Lisa Joy traían de vuelta la mítica Almas de metal del efectivo director y escritor de Best Sellers Michael Crichton (La amenaza de Andrómeda, Parque Jurásico, Esfera…). La película de 1973 fue pionera en varias cosas, entre ellas, la utilización de gráficos por ordenador; y anticipó otras tantas, como los asesinos inmortales del slaher o la mismísima Terminator de James Cameron. Vista en el momento actual y desde la perspectiva de los jugadores, hubo algo más, solo apuntado entonces y que se convirtió en la base de la serie: los NPCs como centro de la historia.
Qué dura es la vida de los NPCs
La primera temporada de Westworld traía al primer plano las pequeñas historias de esos NPCs anónimos que pululan en sus tareas circulares ajenas a todo lo demás. Los de Red Dead Redemtion, para más señas, dado el contexto de parque de atracciones ambientado en el oeste americano.
Así, la paulatina adquisición de conciencia les empujaba a rebelarse contra esos humanos que los miraban con condescendencia, que los mataban sin ningún remordimiento. Un ¡basta ya! que se iba cociendo poco a poco y a base de romper esas pequeñas rutinas que les atenazaban.
Adios a la quinta temporada. Los humanos ganan la partida
Aunque errática y con radicales cambios en su orientación, Westworld fue capaz de acumular en estos años 54 nominaciones a los Emmy y adornar sus estanterías con nueve de ellos. El comunicado de HBO elogia a sus creadores por haber llevado hasta el espectador “una odisea alucinante, elevando el listón en cada paso”. Continuando con los obligatorios agradecimientos:
“Estamos tremendamente agradecidos con [Nolan y Joy], junto con su elenco, productores y equipo inmensamente talentosos, y todos nuestros socios en Kilter Films, Bad Robot y Warner Bros. Television. Ha sido emocionante unirme a ellos en este viaje”
Los creadores, claro, se lamentan de no poder concluir las vías abiertas en la historia. Ineludiblemente y una vez más, los humanos han aplastado a los NPCs.
Fuente: MeriStation